preciosa dama de Flandes,
ven a encontrarme, Francine,
en la verde naturaleza de les Landes.
Te fuiste lejos Francine,
pero es hora de volver,
a ver las nubes que quieren llover,
y a mostrarme tu rojo carmín.
Te escribo desde esta infinita plage française,
con la mirada perdida en el invisible oeste,
y mi mente inundada de sueños sobre ese lejano nuevo mundo.
Te espero en esta eterna plage française,
ven a verme Francine, aquí al frágil este,
a tu tierra, en este triste aunque hermoso viejo mundo.
Te fuiste lejos Francine,
¿cuándo volverás?
Vuelve y comprobarás,
que aquí dejaste un amor sin fin.
Si a mis brazos decides volver, Francine,
estaré siempre esperándote tras el viejo puerto,
donde nos conocimos, junto al árbol muerto.
Firmado: Tu amor eterno, tu amadísimo Delfín.
Iván Lus
28/06/2014
@LusDIvan