Pero que suerte tuve al haber perdido el contacto.
Aún recuerdo tu ancha sonrisa y tus estrellas de jade,
y nuestro primero, tan pésimo como el segundo acto.
Siempre fuiste una niña mimada,
destinada a no ser nada.
Tan dulce y alocada.
Siempre serás una niña mimada.
30/03/2011
Twitter: @LusDIvan
No hay comentarios:
Publicar un comentario